· La máxima responsable del deporte a nivel autonómico realizó hoy su primera visita oficial al club baionés tras su toma de posesión el pasado mes de diciembre
· Marta Míguez comprobó in situ el funcionamiento de una escuela que presta servicio durante todo el año a cientos de personas con distintas discapacidades
· La secretaria xeral valoró muy positivamente la iniciativa “por el impacto que tiene sobre un grupo social con gran relevancia y presencia en la sociedad”
La secretaria xeral para o Deporte de la Xunta de Galicia, la ourensana Marta Míguez, realizó hoy su primera visita oficial al Monte Real Club de Yates de Baiona tras su toma de posesión del cargo el pasado mes de diciembre.
La máxima responsable del deporte a nivel autonómico quiso conocer in situ el funcionamiento de la Escuela de Vela Adaptada que el club baionés puso en marcha hace cinco años para acercar el mar a personas con discapacidad y permitirles navegar en igualdad de condiciones. Unos objetivos que, en palabras de la secretaria xeral, son compartidos plenamente por su departamento.
La Escuela de Vela Adaptada del Monte Real, dijo Marta Míguez, es “una iniciativa con un impacto muy importante para un grupo social de gran relevancia y presencia en una sociedad en la que, desgraciadamente, tiene muchas menos oportunidades que otras personas”. Es por ello, aseguró, que la intención de la secretaría es darle continuidad al apoyo que la Xunta de Galicia le venía prestando desde hace años.
En su visita al Monte Real, acompañada por el Jefe del Servicio Provincial de Deportes de Pontevedra, Daniel Benavides, la secretaria xeral fue recibida por el presidente y vicepresidente del club, José Luis Álvarez y Alejandro Retolaza, así como por el nuevo gerente, Óscar Calero.
Coincidió, además, con un grupo de alumnos y alumnas del Centro Juan María de Nigrán, una agrupación que presta servicio a personas con discapacidad intelectual y a sus familias, y que desde hace años acude a Baiona para navegar con la Escuela de Vela Adaptada. Míguez compartió con ellos unos momentos de conversación e incluso llegó a subirse a uno de los barcos en los que previamente salieron a navegar.